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Miércoles 3 de octubre, a las 5Pm, en el Colegio de Ingeniero de Caracas

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LA REGLA DE TRES VENEZOLANA

(redacción Philippe MANDAR – Caracas, Mayo del 2000).

La filosofía

En los años 60, final de la era de las descolonizaciones, Jean Paul Sartre, prólogo el libro de Franz Fanon "Los condenados de la tierra" expresando:

"No hace mucho tiempo, la tierra contaba con 2.000 millones de habitantes, es decir, 500 millones de hombres y 1.500 de indígenas. Los primeros disponían del Verbo, los otros lo tomaban prestado. Entre aquellos y éstos, reyezuelos vendidos, .... servían de intermediarios. La elite europea se dedicó a fabricar una elite (tropicalizada) , ..., se le introdujeron en la boca mordazas sonoras, grandes palabras pastosas, ...., eran un eco. De Paris, Londres, Ámsterdam, nosotros lanzábamos palabras: ¡Partenón! ¡Fraternidad! y (en las colonias) otros labios se abrían: ¡...Tenón... !, ¡...Nidad...!. Era la Edad de Oro.".

En su libro, Franz Fanon percibía el nacimiento de un nuevo sistema mundial sobre las raíces del neocolonialismo, algo como "Cámbialo todo para que no cambiara nada".

Los imperios desaparecieron, de la bipolarización quedo una monopolarización, los capitales supra-nacionales, borran las fronteras, las culturas y las ideologías. La mundialización organiza y globaliza nuestro mundo, una economía, una ideología, un polo único, una sola voz, un consenso obligado que vigila un censor. Los hombres son más prósperos, los demás, mucho más, y más pobres, menos cultos y siempre al límite de una sobrevivencia: derecho fundamental que cuidan las instituciones internacionales garantes de 1a estabilidad del sistema.

Al descubrimiento de los nuevos mundos, los hombres ofrendaban pedazos de vidrios y secretos del Verbo por oro dorado, el balance era perfectible, ofrecieron bautizar para civilizar los indígenas y sus riquezas. Organizando y distribuyéndose el mundo, crearon imperios monárquicos, el oro dorado financio y subsidio el desarrollo de los hombres, para que con más facilidad pudieran amparar a los indígenas, como el todopoderoso cuida su rebaño.

Hoy la tierra consta con 6.200 millones de habitantes, o sea, 500 millones globalizadores y 5.700 millones de globalizados. Los primeros disponen del verbo, los otros lo tomaban prestado. Entre aquellos y éstos, vendidos con mordazas sonoras sirven de intermediarios. De Paris, de Londres, de Washington lanzan palabras ¡Globalización!, ¡Libre Mercado!, ¡Democracia!, ¡Meritocracía...!, y (en las des-colonias) repetimos ¡...ición...¡, ¡...Ibe... Cado...¡, ¡...Cracia! y ¡Gracias!., ¡Muchas Gracias!. Es la edad de Oro,    negro.

En el mundo al descubierto, los globalizadores ofrecen apoyos financieros y doctrinas por oro negro. Como el balance queda siempre perfectible, no se cansan de pensar que se puede mejorar los intercambios, ofrecer democratizar los globalizados y sus riquezas. Mundializando(se) y reservándose el mundo, crean imperios financieros. El oro negro financia y subsidia el desarrollo de los globalizadores, para que con más facilidad puedan amparar los globalizados, como el todopoderoso cuida su rebaño.

¿Cuento? ¿Propaganda?. No, solamente observaciones, lógica matemática, cartesiana. Veamos nuestro ejemplo venezolano:

La Matemática

Hoy, la Unión Europea subsidia su agricultura, exportando a precios de dumping que hunden las economías agrícolas autenticas y sinceras de los "globalizados". EEUU, Japón mantienen políticas férreamente proteccionistas, que obstaculizan sus mercados a los globalizados. ¿Y de donde provienen los subsidios de los globalizadores para sostener sus políticas comerciales y sus economías? ¿de sus recaudaciones?, ¿Quién financia para que puedan prestar a los globalizados?.

Alrededor de 25$ el Barril del petróleo, Los globalizadores reclaman medidas para abaratarlo, argumentando que "es una situación insoportable que puede romper el equilibrio y la estabilidad del mundo, el oro negro, no debe ser tan carro" (¿será por ser negro?). Por un barril intercambiado el globalizado recibirá 25$ y el globalizador generará una utilidad de hasta los 250$. ¿De quien es esta riqueza?, ¿Quién esta abusando?

"El análisis es a veces un medio de fastidiarse en detalle de los que era aceptable en su conjunto". (P. Valery:  Malos pensamientos y otros). Dejamos un momento los discursos y las filosofías, hagamos una simple y pragmática "regla de tres", para la cual no se requiere que sabios nos prestan Verbos.

La Regla de Tres

Consideramos un globalizador importador de petróleo: Francia por ejemplo y, un globalizado exportador de un volumen similar de petróleo: como los es Venezuela:

1) por ser Francia un país que importa un volumen de petróleo equivalente a la cuota OPEP de Venezuela, consideramos estos dos países como muestras representativas del fenómeno global, o globalizado.

2) En un país como Francia, 1 litro de gasolina super95 es vendido a la bomba 7,1 Francos (son +/- 1 Dólar o 686 Bolívares). De este monto:

- 83% son impuestos, principalmente: Impuesto al Valor Agregado "TVA" de 19.6%, un Impuesto Interior sobre los Productos Petroleros "TIPP" hoy de 41l,51 Francos por litro, hasta un Impuesto Ambiental (ecotaxe actualmente en discusión).

- 17% representan los costos de compra del petróleo bruto, su transporte, su almacenamiento, su refinación y su distribución de los cuales solamente unos 10% representan la comprar del petróleo bruto y 7% representan los demás gastos.

3) En 1999 a Francia, la importación de petróleo costo 51.000 Millones de francos (3.03% de sus importaciones) y de los diferentes impuestos aplicados a los productos petroleros, solamente considerando la TIPP (excluyendo los demás impuestos aplicados) esta importación genero al fisco Francés 162.000 Millones de francos, monto equivalente a más de la mitad de los impuestos sobre los ingresos recodados por Francia (330.000 Millones de francos), o sea, que el oro negro de un país como Venezuela generará en un país como Francia una recaudación por concepto de TIPP equivalente a 49% de los impuestos pagados por los franceses (más si se toma en cuenta los demás impuestos aplicados a la gasolina).

4) La población venezolana (23 millones) representa 39% de la población francesa (59 millones).

Si el Globalizado no produce o no vende esta riqueza, el Globalizador terminara de percibir una utilidad de 162.000 Millones de Francos. ¿No será que este monto lo produce el Globalizado? ¿Será justo este proxenetismo mundializado sobre las riquezas y el trabajo de los países como Venezuela?. En realidad no será a los ciudadanos globalizados a los cuales se recauda este monto? Si así es, deducimos que cada uno de los venezolanos (cada uno de los hombres, mujeres, cada niños, que sea un bebe, un joven, un anciano, ....) genera (o paga indirectamente) 162.000 Millones de francos / 23 Millones de habitantes = 7.043 Francos por año, contribución a comparar con los impuestos pagados por cada uno de los franceses: 330.000 Millones de francos / 59 Millones = 5.593 Francos por año. O sea, que un Venezolano genera más impuestos en los países importadores de petróleo que los ciudadanos de estos países.

En el mundo hay +/- 1 globalizador por 10 globalizados, hay globalizados con muchos recursos y otros con menos o pocos recursos. Imaginamos que el globalizado promedio tenga como riqueza el equivalente de la cuarta parte del oro negro comercializado por un venezolano: deducimos que un globalizado del mundo genera un promedio de riqueza para los demás países de:

7.043 Francos x 10 (globalizados por globalizador) x 1/4 (de la riqueza de un venezolano) = 17.608 Francos, monto a comparar a los 5.593 Francos pagados por un globalízador promedio.

El proxenetismo petrolero, Conclusión de la Regla de Tres

Se observa que un globalizado del mundo además de deber pagar (directamente o indirectamente) en su propio país los impuestos que le corresponde, este globalizado pagará indirectamente, por medio de un pago disfrazado por los países globalizadores más de 3 veces los impuestos pagados por un ciudadano globalizador en su propio país

Los hidrocarburos son sobre tasados, y como fuente principal de energía para mover las economías, este sobre precio es un sobre costo artificial que se paga con un incremento de los costos y precios de los productos de los paises globalizadores, que pagaran los ciudadanos de los países globalizados: los productos, servicios, créditos, lecciones de verbos,..... de los países globalizadotes son artificialmente incrementados para facturas estos impuestos a los globalizados..

Probablemente, en un país como Francia, por el juego de la redistribución de la riqueza, por el financiamiento y las inversiones del estado, permitidos por la recaudación de los impuestos, buena parte de los impuestos pagados por los franceses proviene de esta redistribución o sea del dinero proveniente del proxenetismo globalizado. ¿Será justificable? ¿No será esta ciencia de la “globalización” y del “libre mercado”, al menos una fuente de generación del endeudamiento y del empobrecimiento de los países globalizados?, Auque, un país globalizado como por ejemplo Venezuela es más rico (riqueza por habitante) que sus prestatarios, este proxenetismo globalizado lo condiciona a ser un "condenado de la tierra" a cadena perpetua.

Por cierto, los franceses desafían la adversidad con esta frase muy popular "no tenemos petróleo, tenemos ideas", ¿Será que intercambian ideas por petróleo?. ¿Somos nosotros "bobos", con una tan grave falta de ideas (o de Verbos) que nos obliga a comprarlas hasta arruinarnos y tener 80% de nuestra población pobre?, ¿será que este 80% de nuestra población prefiere comer Verbos que proteínas?.

La abolición de la esclavitud y del colonialismo han sido grandes conquistas de la humanidad. Hoy el indígena es libre, pero se queda prisionero de reglas, ayer colonialistas, imperialistas, ... hoy mundialistas y globalizadoras, donde las matemáticas modernas de los sabios, prestadores de Verbos, rechazan el derecho y respeto a la simple y justa "regla de tres", tutelando el mundo de los globalizados siempre al limite del soportable. A los prestadores de Verbos deberíamos regalar la “regla de tres”.

Movimientos de ciudadanos franceses, españoles, alemanes, .... denuncian justamente el abuso de sus naciones a aplicar tales impuestos exagerados sobre los productos petroleros.

La conclusión lleva lógicamente a una propuesta

Por ser el petróleo uno de los productos más intercambiado, por ser un motivo de tensiones internacionales fuertes, por ser un producto de los más tasados, ¿no seria lógico que sea el petróleo un tema prioritario en los debates en la Organización Mundial del Comercio O.M.C.? mucho más prioritario que cualquier otro temas debatido estos últimos tiempos, más prioritario que el cambur, del cual tanto se hablo, tema que ilustra muy bien los estereotipos sobre las “republicas bananeras”.

Por suerte, parte de los productores petroleros son asociados dentro de la O.P.E.P para así poder presentarse con más fuerza, como una sola voz. Faltaría registra esta organización como miembro en la O.M.C. y llevar en la mesa la denuncia del proteccionismo en contra de los productos petroleros, llevado al proxenetismo en los intercambios internacionales, institucionalizados.

Las principales justificaciones enunciadas por los países aplacadores de tales impuestos sobre los productos petroleros son, que la factura petrolera es muy elevada, la cual pone en dificultades y recesión las economías “motores”, que no es el petróleo una energía renovable y es agotable. Que, a aplicar tales impuestos, se frena el consumo, lo que permite controlar y limitar las importaciones y la declinación de las reservas, generando sin trabajo una utilidad muy substancial que permite financiar y promover otras energías alternativas, ofrecer soluciones ambiéntales, un ayudar los países más pobres.

De otro lado, los países consumidores claman por un aumento de la producción del petróleo, ¿no será una demostración que estos justifican que auque sea agotable, que genera contaminaciones,... que se debe incrementar la producción petrolera?. La lógica, seria satisfacer esta demanda hasta niveles concertados entre productores y consumidores, reduciendo los frenos y barreras fiscales, para que así, más barata los productos petroleros, la gasolina para el consumidor (final), se incrementara el consumo del petróleo, justificando un incremento de su producción.

 Las reglas del comercio internacional condenan los niveles de impuestos proteccionistas, seria obligar a una reducción progresiva de estos impuestos hasta niveles comparables para los demás intercambios, e1 cambur, el acero o el automóvil por ejemplo.

El buen sentido nacional, debería proponer en las instancias internacionales:

1 ) Condenar la aplicación de impuestos exagerados en los productos petroleros, y obligar a una reducción progresiva de estos impuestos hasta niveles comparables a los demás intercambios comerciales. Esta medida permitiría, además, una reducción muy importante del precio final de los productos petroleros, abaratando los costos de producción de los productos industriales, generando un impulso en las economías, que hoy más que nunca lo requieren.

2) Más barato los productos petroleros, se incrementara la demanda del petróleo, satisfazando la solicitud de los países desarrollados, por un incremento de la producción.

3) Incrementando la demanda del petróleo, se incrementaría su producción, permitiendo más fácilmente una disminución en su precio de comercialización.

4) Por ser el petróleo un motor del desarrollo, a aumentar su producción se estimularía las economías.

5) Si tal como los desean y los aplican los países consumidores se debe controlar el consumo del petróleo, se incrementaría el precio justo a las exportaciones del petróleo como freno (o como regulación) al consumo y al agotamiento de las reservas, generando una utilidad a los países productores sobre sus riquezas y sus trabajos.

6) Tal utilidad adicional seria dedicada al desarrollo de nuevas fuertes de energías, al control de las contaminaciones ambientales generadas por el uso del petróleo que producen, ayudar los países más pobres, y prestar a cualquier país en proyectos y desarrollos de interés planetarios.

(Al 31 de mayo  2000 1 US$  = 7,03 Francos francés, 1 US$ = 679.63 Bolívares venezolanos.)

Philippe MANDAR – Caracas, Mayo 2000.